Coaching, coachingDVida, InteligenciaEmocional, JLMorenoCoach, Política

Día 64: Reflexiones descolocadas.

Continúan esas nubes en el cielo. Van y vienen. Parece que entienden que no estamos en tiempo de muchas alegrías.
Todos necesitamos de sol ya, aunque solo sea para verlo desde estas ventanas que nos separan del mundo que fuimos.
Madrid no pasa de fase. Esto quiere decir, entre otras cosas importantes, que todavía no podemos ir a abrazar a los nuestros. Más que salir a la calle, correr, saltar o gritar, necesitamos los abrazos de las personas que nos importan.
 
Nunca habíamos pensado que un abrazo iba a tener tanta importancia, ni ese valor que tiene. Cuántos abrazos no habremos dado por comodidad, por dejadez, por no movernos.

Todos tenemos miedo porque esto no vemos el final de esto.
Miedo a contagiarnos, miedo a contagiar a alguien, miedo a la enfermedad; miedo a morir a deshora, miedo a perder a esos que quieres y son más vulnerables frente el virus hijoputa este.
Miedo económico, miedo al trabajo, miedo a tanta inseguridad.
En estos días, lo que más alarma me genera es el mismo Estado de Alarma.
 
Un estado excepcional que está limitando las libertades de todos.
Creo que hay otras posibilidades, en este país como en otros, para controlar la enfermedad con la misma contundencia. Y si alguien se salta los controles, que se actúese contra él con contundencia. Es cuestión de gestión. Pero lo fácil es esto, el Estado de Alarma.
🔴 El Estado de Alarma supone un ataque contra los derechos individuales.
Un Estado de Alarma siempre ha de ser transitorio, corto, y acompañado de un Plan que genere seguridad y esperanza, en este caso, a los ciudadanos. ¿Tienen ustedes alguna esperanza? ¿Fecha? ¿Saben de algún plan?
Hoy, lo único que conocemos es que los responsables políticos quieren alargar el Estado de Alarma un mes más, hasta junio. Ya no 15 días, ahora directamente 30 días. ¿Para qué van a estar mareando la perdiz?
Estamos viviendo una vida congelada.
👉¿Cuántos encuentros nos está robando esto? ¿Cuántos momentos?
Muchos posiblemente todavía no nos demos cuenta, o no queramos darnos cuenta, de que algo ha cambiado ya.
¿Los valores, las normas, las virtudes cívicas?
 
¿Saldremos de esta? Claro que sí. Pero no olvidemos nunca que muchos habrán quedado en el camino.
¿Qué habremos aprendido? Depende.
Todo a nuestro alrededor se mueve a base de emociones. Diría que, incluso, tratan de controlarlas desde fuera, porque saben de nuestra fragilidad en circunstancias tan vulnerables como esta.
Lo noto en los discursos de unos y otros. En esos mensajes dirigidos única y exclusivamente a salvar, de alguna manera, los propios errores.
➡️ No olvides que las emociones vienen de dentro de ti.
➡️ No es lo externo. Es lo que nosotros decimos, o pensamos sobre lo externo, lo que crea esos sentimientos que nos levantan o nos tumban.
Queremos culpar a lo externo. Pero no. Nosotros somos los responsables de lo que nos pasa.
Huimos de las responsabilidades y nos perjudicamos a nosotros mismos.
¿Para qué resistirnos? Estamos aquí. Nada va a cambiar a nivel externo, el único cambio que podemos hacer depende de nosotros.
➡️ Cada desafío es un escalón.
➡️ Visualiza una vida mejor. No esperes que los demás te dirijan. Tras un desastre o un fracaso debemos visualizar una vida diferente, mejor.
➡️ Es mejor fracasar mil veces que no haberlo intentado nunca.
➡️ Sin fracasos ni se aprende ni se crece.
➡️ Cada día es una oportunidad para crecer. Hoy lo es.
➡️ No hay prisa, pero tampoco pierdas el tiempo.

La vida no va de lo que nos ocurre sino de aquello que hacemos con lo que nos está ocurriendo.

Estar vivo consiste en ir caminando, subiendo y bajando por empinadas cuestas, esquivando o saltando obstáculos, tropezando, cayendo y volviéndonos a poner de pie.
👉 Ocurra lo que ocurra, nosotros somos quienes decidimos qué significado tiene aquello que ocurre.
Estamos vivos, es sábado, así que a levantar ese ánimo y mover un poco el cuerpo!!!

2 comentarios en “Día 64: Reflexiones descolocadas.”

  1. Todos los días son una batalla nueva… Y el final del caos se vislumbra demasiado lejos… Es verdad, tenemos miedo de todo… Incluso sobre todo el propio estado de alarma. Ojalá podamos ver este virus superado cuanto antes y ojalá tengamos la fuerza suficiente para levantarnos y recuperarnos a pesar de las pérdidas. Aunque las pérdidas humanas nunca podrán suplirse. Abrazos!!

    Le gusta a 1 persona

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s